ZOOMAT

El Zoológico Miguel Álvarez del Toro (ZOOMAT) tiene una rica historia que se remonta a los esfuerzos pioneros de conservación en el estado de Chiapas, México. Su fundación estuvo impulsada por la necesidad de proteger la biodiversidad chiapaneca y crear conciencia sobre su valor. Desde su creación, el zoológico ha tenido varias sedes, y cada una de ellas ha sido clave en su evolución hasta convertirse en el santuario que es hoy.

El Zoológico Miguel Álvarez del Toro (ZOOMAT) tiene una rica historia que se remonta a los esfuerzos pioneros de conservación en el estado de Chiapas, México. Su fundación estuvo impulsada por la necesidad de proteger la biodiversidad chiapaneca y crear conciencia sobre su valor. Desde su creación, el zoológico ha tenido varias sedes, y cada una de ellas ha sido clave en su evolución hasta convertirse en el santuario que es hoy.


Primeros Pasos: Fundación e Inicios

El ZOOMAT tiene sus raíces en el trabajo del profesor Eliseo Palacios Aguilera, quien en los años 40 fundó el primer museo de historia natural y zoológico en Tuxtla Gutiérrez. Este espacio primigenio, aunque más pequeño y modesto en comparación con lo que sería el ZOOMAT, sentó las bases para el desarrollo de un centro de conservación dedicado al estudio y protección de la flora y fauna de Chiapas.

Años más tarde, Miguel Álvarez del Toro, un zoólogo comprometido con la preservación de la vida silvestre en Chiapas, tomó las riendas del proyecto y lo transformó en una referencia internacional para la conservación. Bajo su dirección, el zoológico se trasladó a un nuevo emplazamiento y fue ampliado, consolidándose como un espacio dedicado no solo a la exhibición de especies, sino a la educación ambiental y la investigación científica.


Sedes del Zoológico

El zoológico ha pasado por varias etapas y ubicaciones desde su fundación. El primer espacio donde fue establecido se encontraba en las cercanías del centro de Tuxtla Gutiérrez, un área relativamente pequeña para la creciente misión del zoológico. A medida que el proyecto fue tomando forma y ganando reconocimiento, se hizo evidente la necesidad de un espacio más amplio que pudiera albergar una mayor diversidad de especies y permitir un mejor manejo de las mismas.

Posteriormente, el zoológico fue trasladado a la reserva ecológica El Zapotal, una extensa área de más de 100 hectáreas en la periferia de Tuxtla Gutiérrez, donde actualmente se ubica. Este lugar no solo proporcionó un espacio adecuado para el desarrollo del zoológico, sino que también permitió la conservación de la fauna en condiciones más cercanas a sus hábitats naturales. El traslado a El Zapotal fue una decisión fundamental para consolidar la visión de Miguel Álvarez del Toro, quien veía al zoológico no solo como un lugar de exhibición, sino como un refugio para la biodiversidad de Chiapas .

Evolución y Expansión

Con el paso de los años, el ZOOMAT ha evolucionado en su enfoque y estructura. Mientras que en sus primeros años las instalaciones estaban diseñadas para mostrar la fauna en jaulas convencionales, la nueva sede en El Zapotal permitió un enfoque mucho más ecológico y sostenible. En la actualidad, los animales habitan en espacios que imitan sus hábitats naturales, lo que no solo mejora su bienestar, sino que también ofrece a los visitantes una experiencia más inmersiva y educativa.

A lo largo de su historia, el ZOOMAT ha sido un baluarte de la conservación en Chiapas, comprometido con la investigación científica, la protección de especies en peligro de extinción y la educación ambiental. Su ubicación actual, en medio de la exuberante vegetación de la reserva ecológica, refleja el compromiso del zoológico con la protección del medio ambiente y la vida silvestre, mientras sigue siendo un espacio accesible para las familias chiapanecas y los turistas que buscan una conexión más profunda con la naturaleza.